Aunque hay algunos coleccionistas que aún poseen algún modelo de la época que cuidan con mimo inusitado, esta iniciativa ha generado gran expectación en las redes sociales. Son miles los seguidores que ansían que la marca Ossa decida dar el visto bueno a este innovador revival que además está propulsado por energía eléctrica respetando, eso sí, el diseño compacto del modelo primigenio.
En el diseño monocasco, tanto el chasis como la carrocería forman un todo único. Esta remozada versión Monocasco Bike es un auténtico tributo. Tan sólo se ha actualizado ligeramente la línea de diseño para que la aerodinámica no le haga perder velocidad pero mantiene el inconfundible toque retro. La marca Ossa, que desapareció el mismo año que su piloto de cabecera, también figura en el chasis y en el asiento.
Lo mejor de todo, que el sistema de propulsión abandona la gasolina para basarse en la energía eléctrica.
Así era
La Ossa 250 GP fue una moto revolucionaria para su tiempo. Obra de un joven ingeniero llamado Eduardo Giró. Diseñada como un todo compacto que incluía una viga con el depósito de gasolina abrazado por el monocilíndrico de dos tiempos, refrigerado por aire y la válvula rotativa.
Así es
La marca
OSSA, cuyo símbolo distintivo es un trébol, ahora está centrada en la fabricación de las motos de trial y enduro enfocadas sobre todo a la alta competición. No obstante, las demandas de los aficionados están obligando al mítico fabricante a poner en marcha cuanto antes la producción de la monocasco.
Piloto mítico
Santiago Herrero, icono de la marca del trébol, es recordado como uno de los mejores pilotos de la historia. Compitió con Derbi siendo su propio mecánico. Luego fue piloto de la Bultaco Tralla 125 y, posteriormente, en la marca española Lube.
En 1964 y 1965, Herrero fue tercero y segundo respectivamente en el Campeonato de España de 125cc. Al año siguiente, con la Ossa 230 gana el Campeonato de España.
En 1969 está a punto de conquistar el Campeonato del Mundo de 250 con la Ossa monocasco de magnesio pero una pequeña avería le obliga a retirarse en la última carrera, acabando tercero en la clasificación final.
En 1970, cuando es líder del campeonato, una colisión con Stanley Wood en la Westwood Corner acaba con su brillante trayectoria y, a la postre, con el abandono de la competición de la marca Ossa.
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