Es lo que parece: un lugar donde sentarse al sol para disfrutar del mar desde la orilla de la playa. Su cuidado diseño y estética en madera natural hacen de la silla Bombwatcher Surfboard un lugar privilegiado para el aficionado al surf. Es muy fácil de plegar y está realizada en madera noble muy resistente al embate de la sal y el agua. Es el trono del surfero por excelencia o del que aspire a serlo...
Su elaboración es completamente artesanal, realizada hasta el mínimo detalle a mano sobre cedro rojo de dos pulgadas de grosor y roble blanco para los largueros y aletas. Cuando se fija en la arena de la playa adquiere tanta consistencia y estabilidad que es capaz de soportar hasta 160 kilos de peso.
Este tipo de madera tiene unas cualidades naturales muy resistentes. Además, se han potenciado con el tratamiento al que es sometida, basado en varias capas de aceites naturales, y el sellado final con un barniz de alta calidad. Este proceso permite asegurar al fabricante que la integridad de la madera puede durar toda la vida intacta con unos pocos cuidados básicos.
Es posible adquirirla en el formato original que muestra toda la belleza natural de la madera o bien personalizarlas con pinturas o anagramas, pero en ambos casos el acabado se realiza en la mítica Cocoa Beach de Florida, al gusto del cliente.
Son muy fáciles de plegar, transportar y guardar, lejos de los efectos nocivos de la intemperie marina cuando no se utilizan o hace mal tiempo. El mantenimiento es tan sencillo como limpiarla una vez al mes con un paño húmedo y acto seguido con otro paño suave y seco.
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