Hay un modelo más modesto de Cristallino, construido enteramente en vidrio y aluminio en el que se han utilizado los más sofisticados métodos artesanales para crear cada unidad como una pieza artística única. Sin embargo, el modelo Gold LE marca la diferencia con la exclusividad que se deriva de unos jugadores realizados en oro blanco y dorado sobre una superficie pulida del mejor cristal de Carrara.
Los jugadores están montados sobre bastidores de aluminio y la mesa está decorada con varios adornos realizados en oro de 24 quilates. Los muelles de los topes laterales también están chapados en oro y el marcador está compuesto por cubos numéricos con los dos colores del noble material. Todos los remaches de la estructura están soportados por juntas de aluminio y montados a mano por el equipo de artesanos de Teckell.
La serie numerada de sólo cincuenta unidades es una pieza de joyería gigante que combina a la perfección elegancia y funcionalidad en la que se han utilizado sofisticados sistema de corte y pulido con diamante.
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