La aplicación está disponible tanto para iPhone como para smartphones con sistema operativo Android. La conexión entre el objetivo y el teléfono móvil se realiza mediante WiFi Direct. Aunque estos dispositivos prácticamente son una cámara funcional a todos los efectos, necesitan la pantalla del móvil para encuadrar y ajustar la imagen de forma precisa.
La QX100 es el modelo más completo con un avanzado sensor de imagen. Tiene un tamaño parecido al de las réflex, una lente Carl Zeiss con apertura f/1,8-4,9, y una resolución de 20 megapíxeles. Tal vez, lo peor radique en que para tratarse de un accesorio, tiene un precio algo elevado, puesto que está previsto que cueste 440 euros. Por su parte, la QX10 es algo más modesta en prestaciones pero aún así viene con un sensor de 18 megapíxeles, zoom de 10 aumentos, y un precio significativamente más accesible de 199 euros.
Una de las limitaciones más importantes que encontraran en este producto, los profesionales y usuarios avanzados de la fotografía, es que las imágenes obtenidas son en formato JPEG, puesto que no es capaz de generar archivos RAW, que permiten una mejor y más fácil edición posterior en el ordenador.
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